Un nuevo miembro debe ser añadida al árbol genealógico de los tiranosaurios. El nuevo Alioramus altai, un animal con cuernos, hocico largo y peso modesto, compartió el mismo entorno con sus parientes depredadores más grandes. Un nuevo estudio describe este fósil excepcionalmente bien conservado, que aporta datos esclarecedores sobre este género de tiranosaurios poco conocido con anterioridad, y describe una nueva serie de adaptaciones para la conducta carnívora.
“Este fósil espectacular nos permite saber que existió una gran variedad ecológica y anatómica en los tiranosaurios, mucho mayor de lo que se creía”, explica Stephen Brusatte, del Museo Americano de Historia Natural. “No todos los tiranosaurios eran megadepredadores preparados para el acecho y el desmembramiento de presas grandes. Algunos tiranosaurios eran pequeños y delgados. Comparado con el tiranosaurio, este nuevo animal es como una bailarina”.
Los tiranosaurios son depredadores bípedos que vivieron a finales del periodo cretácico, hace entre 85 y 65 millones de años.
Hasta ahora, el Alioramus sólo se conocía por fragmentos de fósiles brevemente descritos por un paleontólogo ruso décadas atrás, y ha existido un largo debate sobre si este animal era un verdadero tiranosaurio, un primo más primitivo, o quizás un Tarbosaurus joven.
Este nuevo espécimen, que ha permitido reconocer a la nueva especie como tal , fue hallado durante una expedición del museo en 2001 al desierto del Gobi en Mongolia, dirigida por Mark Norell, catedrático de la división de paleontología del museo, y Michael Novacek. De hecho, fue hallado en el mismo sitio que un fósil de Tarbosaurus. Pero aunque su esqueleto es anatómicamente similar al de este pariente mayor, el A. altai tiene la mitad de su talla. Su peso se ha calculado en 369 kilogramos.
El cráneo es notablemente diferente del de sus parientes cercanos. Aunque este dinosaurio era carnívoro, sus dientes son delgados, el cráneo tiene uniones musculares pequeñas y débiles, un hocico largo y ocho cuernos que medían probablemente unos 12 ó 13 centímetros. Todos estos son rasgos nunca antes vistos en un tiranosaurio.
“Este fósil espectacular nos permite saber que existió una gran variedad ecológica y anatómica en los tiranosaurios, mucho mayor de lo que se creía”, explica Stephen Brusatte, del Museo Americano de Historia Natural. “No todos los tiranosaurios eran megadepredadores preparados para el acecho y el desmembramiento de presas grandes. Algunos tiranosaurios eran pequeños y delgados. Comparado con el tiranosaurio, este nuevo animal es como una bailarina”.
Los tiranosaurios son depredadores bípedos que vivieron a finales del periodo cretácico, hace entre 85 y 65 millones de años.
Hasta ahora, el Alioramus sólo se conocía por fragmentos de fósiles brevemente descritos por un paleontólogo ruso décadas atrás, y ha existido un largo debate sobre si este animal era un verdadero tiranosaurio, un primo más primitivo, o quizás un Tarbosaurus joven.
Este nuevo espécimen, que ha permitido reconocer a la nueva especie como tal , fue hallado durante una expedición del museo en 2001 al desierto del Gobi en Mongolia, dirigida por Mark Norell, catedrático de la división de paleontología del museo, y Michael Novacek. De hecho, fue hallado en el mismo sitio que un fósil de Tarbosaurus. Pero aunque su esqueleto es anatómicamente similar al de este pariente mayor, el A. altai tiene la mitad de su talla. Su peso se ha calculado en 369 kilogramos.
El cráneo es notablemente diferente del de sus parientes cercanos. Aunque este dinosaurio era carnívoro, sus dientes son delgados, el cráneo tiene uniones musculares pequeñas y débiles, un hocico largo y ocho cuernos que medían probablemente unos 12 ó 13 centímetros. Todos estos son rasgos nunca antes vistos en un tiranosaurio.
Fuente: amazings.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario