martes, 25 de diciembre de 2012

La mayor muestra de arte Paleolítico en Madrid





El presidente de la Comunidad, Ignacio González, ha inaugurado, en el Museo Arqueológico Regional la mayor y más ambiciosa muestra de arte Paleolítico europeo organizada nunca y que expone las primeras muestras artísticas del ser humano. Arte sin artistas. Una mirada al Paleolítico reúne más de 140 piezas, en su mayoría originales, de hasta 42.000 años en el Museo Arqueológico Regional de Alcalá de Henares hasta el 7 de abril.


Las piezas fueron encontradas en los yacimientos más importantes de este periodo, como Altamira, La Madeleine (Francia), Atapuerca o Mas D’Azil. Con la muestra, el Gobierno regional invita al público a reflexionar sobre el origen del arte y las principales realizaciones plásticas de unos seres humanos anónimos que habitaron en el Paleolítico Superior y que comenzaron a dibujar, pintar, esculpir, grabar y modelar la propia historia.

González, acompañado por la consejera de Empleo, Turismo y Cultura, Ana Isabel Mariño, y por el alcalde de Alcalá de Henares, Javier Bello, ha explicado que la muestra rinde homenaje al anonimato de esas personas que han legado una herencia plástica, donde técnica y oficio, se ponen al servicio de esa función primigenia del arte consistente en enseñar, conmover y complacer, en este caso, con fines rituales, mágicos o religiosos.

Piezas mostradas

Según ha destacado el presidente regional, entre las piezas mostradas están la Colección de Grabados de Laussel y su extraordinaria Venus del Cuerno, que es la primera vez que sale del Museo de Aquitania (Burdeos). También resaltan joyas del Paleolítico, que difícilmente podrán volver a ser exhibidas fuera de sus lugares de origen, como el hacha bifaz de piedra de Atapuerca, llamada ‘Excalibur’.

La exposición, comisariada por el profesor de Prehistoria en la UNED, Sergio Ripoll, está organizada en diez unidades temáticas. A través de ellas se descubre el medio físico en el que se desenvolvió la vida artística, sus útiles y técnicas, los motivos que se representaban, la materialización de su expresividad plástica en cuevas o al aire libre, el significado de sus símbolos así como la trayectoria de la investigación de este


Fuentes: cronicanorte.es

jueves, 13 de diciembre de 2012

Hallan en China las pulgas «gigantes» del Jurásico


El equipo de André Nel, entomólogo del Museo de Historia Natural de París, encontró nueve fósiles en las provincias chinas de Daohugou, Mongolia Interior y Liaoning, que datan de dos épocas diferentes, el Jurásico medio (hace 165 millones de años) y del Cretácico inferior (entre 145 y 99 millones de años).

En una época en la que la Tierra estaba habitada por dinosaurios y grandes reptiles, el hallazgo prueba que el tamaño de las pulgas también era visiblemente mayor: el cuerpo de las hembras podía medir entre 14 y 20,6 milímetros y el de los machos entre 8 y 14,7 milímetros.

Estas dimensiones contrastan con las de las pulgas actuales, que oscilan entre 0,8 y 5 milímetros, y miden de media 3,5 milímetros.

Los restos encontrados, tanto de hembras como de machos, muestran que tenían un abdomen largo y ancho, una cabeza relativamente pequeña, patas largas y una antena pequeña y compacta, pero carecían de alas.

Su rasgo más sorprendente es su boca (con forma de sifón alargado), con la que perforaban la piel de sus anfitriones, más larga en las hembras que en los machos y visiblemente menor que la de las pulgas de hoy en día.

Conservan también algunos rasgos primitivos, en particular unas patas traseras no aptas para saltar.

Estas características sugieren a los investigadores que las pulgas gigantes evolucionaron a partir de la mosca escorpión, una especie alada que habitó en el Cretácico inferior, que tenía una boca similar para alimentarse del néctar de las flores y que se extinguió con la aparición de insectos modernos como los mosquitos o las hormigas.

"La boca y los genitales de las moscas escorpión macho son muy similares a los de las pulgas gigantes, lo que apoya la teoría de que ambas especies están relacionadas y que las pulgas gigantes son moscas escorpiones que evolucionaron para alimentarse de sangre", explicó Nel a Efe.

Con motivo de esa adaptación, las pulgas perdieron sus alas y disminuyó el tamaño de su antena y de sus ojos.

El descubrimiento ha aportado también nueva información sobre la evolución en la elección de sus víctimas ya que, en un primer momento, estos parásitos podrían haberse alimentado de la sangre de dinosaurios con plumas y con posterioridad pasaron a los mamíferos y las aves.

"El gran tamaño de estas pulgas en comparación con las modernas indica que en un primer momento no debieron alimentarse de pequeños mamíferos, sino de grandes dinosaurios con plumas", indicó Nel.

"A medida que estos grandes dinosaurios se extinguieron, desaparecieron también las pulgas gigantes, mientras que las modernas se desarrollaron probablemente durante el Cretácico tardío, a la par que los mamíferos", añadió el investigador.

Sin embargo, el motivo de que su tamaño se redujese tanto permanece sin resolver.

"Quizá adaptarse para poder saltar fue una mejor solución evolutiva que tener un cuerpo grande", especuló Nel.

El hallazgo de estos fósiles es poco frecuente, ya que los restos de ectoparásitos, insectos que viven sobre la piel de sus víctimas y entre los que figuran las pulgas y piojos, son poco abundantes y difíciles de encontrar, lo que dificulta la investigación de sus orígenes en la era mesozoica.


Fuente:  EFE

jueves, 6 de diciembre de 2012

Hallan restos del dinosaurio que vivió hace 245 millones de años

Los científicos del Museo de Historia Natural de Londres, de la Universidad de Washington, en Seattle, y de la Universidad de Berkeley, en California, hallaron los restos del Nyasasaurus parringtoni, una nueva especie que pobló la Tierra entre 10 y 15 millones de años antes que los dinosaurios que hasta ahora se creían eran los más viejos. El descubrimiento fue dado a conocer en la revista especializada Biology Letters. Según los paleontólogos, el animal caminaba en dos patas, medía entre 2 y 3 metros de largo, incluyendo una larga cola, y pesaba entre 20 y 60 kilogramos.

 El hallazgo indica que pasaron varios millones de años entre los primeros dinosaurios y aquellos que llegaron a dominar la Tierra. “Cubre la brecha entre los que creíamos hasta ahora eran los dinosaurios más viejos y sus parientes más cercanos” , declaró uno de los autores de la investigación, Paul Barrett, paleontólogo del Museo de Historia Natural de Londres. “Había una brecha enorme en los récords de fósiles donde dinosaurios deberían haber estado presentes, y este fósil claramente cubre esa ausencia” , agregó.

Sin embargo, el equipo de investigadores no puede estar completamente seguro que el Nyasasaurus parringtoni sea el dinosaurio más viejo del planeta, debido a que el esqueleto del animal estaba incompleto: sólo se halló un hueso del brazo exterior y seis vértebras.

La evolución temprana de los dinosaurios es difícil de desentrañar debido a que una rica variedad de reptiles estaban proliferando en ese período. De hecho, muchos investigadores hablan de posibles evoluciones paralelas, evoluciones independientes con muchas de las características que se les suponen a los dinosaurios. De todos modos, los investigadores descubrieron algunas características que sin dudas pertenecen a un dinosaurio, en especial la llamada “cresta deltopectoral elongada” , que servía como ancla para los poderosos músculos pectorales.

Sterling Nesbitt, otro de los autores del reporte, y experto de la Universidad de Washington, en Seattle, había encabezado el equipo de paleontólogos que en 2010 reportó haber hallado el dinosaurio más viejo del planeta, un miembro de la familia de los silesauros. Pero ahora perece que esas criaturas compartieron la parte más austral del supercontinente Pangaea, actualmente Sudamérica, Africa, Antártida y Australia, con los Nyasasaurus parringtoni. “Parece que esas criaturas compartían muchas características con el Nyasasaurus parringtoni. Esos animales eran los primeros de este grupo que posteriormente acabarían en los primeros dinosaurios.

El nuevo hallazgo podría ser el momento en el que ambas clases se separaron la una de la otra” , agregó. Barret finalizó el reporte explicando la importancia del hallazgo. Una noticia que indicaría que es posible cerrar la brecha evolutiva, mostrando que los dinosaurios no comenzaron a dominar la Tierra en sus inicios de la forma que lo hicieron más adelante. “Con este estudio empujamos el origen de los dinosaurios más atrás en el tiempo, a una época en que muchos grupos de reptiles estaban evolucionando. Los dinosaurios comenzaron como un grupo muy significativo de reptiles y al cabo de un tiempo en su historia, de repente explotaron y asumieron el control como las criaturas dominantes en vida durante casi 100 millones de años” , concluyó.



Fuente : elcomercio.com